Gracias al trabajo y el talento de gente como Juan Ángel Laguna Edroso, el desaparecido portal Ociojoven ha tenido brillante continuidad en Ociozero. Allí encontraréis foros y reseñas interesantes sobre cine, literatura, cómic y juegos.
Y me satisface mucho anunciar que allí también podréis encontrar una nueva reseña de mi novela "Infierno nevado". El libró salió hace tres años y está demostrando tener una discreta pero saludable longevidad. Ojalá dure mil años. O eones. Porque ya se sabe que no está muerto quien puede yacer eternamente, y eso incluye a los libros (de papel).
Vaya, pues precisamente estoy pendiente de recibir "Infierno nevado" y con ganas de empezar su lectura.
ResponderEliminarPor lo que cuenta Patapalo en Ociozero, creo que me gustará.
Un saludo.
Espero que no te defraude, Susana. (Y en todo caso, este blog también se puede usar como libro de reclamaciones para lectores insatisfechos.)
ResponderEliminarQué bueno que gracias a internet (y al almacén de las editoriales) sigan vivos libros como éste, que ya hace tiempo que dejaron de ocupar estanterías en las librerías.
Saludos, y ya dirás.
Imagino que si "Infierno nevado" sigue vivo es porque todavía sigue suscitando interés.
ResponderEliminarPor supuesto, estaré encantada de comentarte mis impresiones :)
Ismael, ¡qué buenos ratos he pasado leyendo esta novela! Creo que desde que leí "La piel fría" no había disfrutado tanto con una novela de terror.
ResponderEliminar"Infierno nevado" es excelente. La historia que cuentas me ha gustado; los personajes, geniales, aunque al principio, Celio, no me acababa de entrar (demasiado flojo y auto compasivo).
Lo mejor, sin duda, la prosa: precisa, elegante, con un punto lírico muy emotivo, perfecta en boca de su narrador.
También se agradece que sea una novela tan visual, sin paja ni escenas que adornen la trama.
Lo que sucede en la página 130... ¡oh, Dios, que momentazo! Realmente me sorprendió y creo que a partir de ahí la obra tiene un punto de inflexión que te hace mirar las cosas de otra manera.
Después de esta lectura tan satisfactoria no me he podido resistir a comprar "Rojo alma, negro sombra". Acabo de terminar el capítulo siete, cuando Elías comienza a trabajar de nuevo. No sé por qué, pero me parece que hay algo de Celio Rufo en Elías.
Enhorabuena, Ismael. Tu calidad literaria es potente, de las que tocan de verdad.
Por último, permíteme la cursilería de decir que ya me considero fan tuya y que estaré pendiente de tus nuevos trabajos.
Un saludo.
Gracias, Susana. Es increíble oír cosas así, me llenan de ánimo.
ResponderEliminar"Infierno nevado" es una novela con muchos defectos (tarda una barbaridad en arrancar), pero para mí fue importantísima. La tuve a medio escribir durante años, falto de ánimo y de seguridad en mí mismo, hasta que me dije: o acabas esto o nuca acabarás nada. Y puse toda la carne en el asador, aun sabiendo que seguramente jamás se publicaría. Luego tuve suerte y Equipo Sirius la sacó, pero creo que el verdadero éxito fue terminarla, en aquella época de inseguridades.
Verás que Rojo alma no tiene nada que ver. Representa el siguiente escalón: buscar un estilo propio, no escribir "de prestado" como en Infierno.
Y me ha dado muchas satisfacciones. Espero que te guste, aunque veo que te decantas más por la fantasía épica.
¿Celio Rufo y Elías? Pues no lo había pensado. Supongo que en los protagonistas siempre hay mucho del autor (aunque no todo, ejem).
Y bueno, cuéntame también entre tus fans. Espero que me avises cuando tengas algo publicado (¿o ya lo tienes?) para hacerme con ello.
Un saludo afectuoso y muy agradecido,
Ismael
Entiendo lo que quieres decir: "las primeras novelas no siempre son las mejores". Pero "Infierno nevado" ha sido un buena primera obra. Te aseguro que si no me hubiese gustado tanto, ahora no estaría leyendo "Rojo alma".
ResponderEliminarYo soy una petarda, vamos, que soy muy novel. Me lancé alegremente a escribir una novela sin inseguridades, ni cargo de conciencia alguno. Total, era un juego. Me saldría un churro.
Escribí la historia que quise, la que llevaba dentro, y la vestí de fantasía épica, aunque podría haberle puesto cualquier otro traje.
Yo aún no tengo estilo propio, y cuando estaba escribiendo la novela era algo que ni me preocupaba. Todavía confío en que mi voz saldrá en algún momento, cuando deje de luchar con las palabras.
Y sí, si nada se tuerce en unos meses publicaré esta primera novela en Grupo Ajec. ¿Alucinante, verdad? Ahora sí que me siento insegura. Bueno, qué te voy a contar, Ismael. Tú ya has pasado por esto.
Cuando escribía mi novela me sentía grande y ahora me siento pequeña, pequeña...
Gracias por ser tan cordial e interesarte por mi trabajo.
Después de leer el capítulo ocho de "Rojo alma" he comprendido hasta que punto Guillermo vive en un infierno. Continúo la lectura deseando saber si este muchacho es ángel o demonio. Lo que pinta da escalofríos.
Un abrazo y gracias, de nuevo.